La Paz, Bolivia.
[dropcap style=»default, circle, box, book»]E[/dropcap]n políticas de transporte en las ciudades, las medidas relacionadas con el estacionamiento de vehículos son de gran importancia y por ello merecen un capítulo importante en cualquier Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS). El aparcamiento afecta a muchos problemas: no solo a los vehículos habituales (de residentes o visitantes de la zona), sino también a los de carga y descarga, personas de movilidad reducida (PMR), motos, bicicletas, etc. Genera ocupación de vía (reducción de capacidad y por tanto congestión), ocupación de espacios públicos, accidentalidad, etc. [pullquote align=»right»]En este artículo empezaremos hablando de las implicaciones que tiene no ordenar el estacionamiento en la vía pública y la falta de control del mismo, lo que lleva a una INDISCIPLINA de efectos que diríamos son dignos de una tragedia griega como ilustraremos bien gráficamente.[/pullquote]
Este artículo lo escribo con Miguel Magaña, Director de nuevos negocios de AUSSA, empresa que gestiona, entre otras, la zona regulada (conocida como zona azul) de Sevilla (España) y la de otras ciudades.
De que hablamos cuando hablamos de aparcamiento
Como ya decíamos en la introducción, nos referimos:
- Aparcamiento en vía pública:
- Estacionamiento libre sin límite temporal de cualquier vehículo.
- Estacionamiento regulado, conocido como ORA o zona azul y que tiene una limitación temporal de uso y requiere un pago por ello. También se puede regular el estacionamiento de residentes (como zona verde, si es mixta con las anteriores de rotación o naranja si es exclusiva).
- Estacionamiento de carga y descarga
- Estacionamiento reservado para vehículos especiales o servicios concretos como taxis, PMRs, ambulancia, policía, etc.
- Aparcamiento fuera de la vía pública:
- Clasificación respecto al tipo de usuario:
- Rotación, para visitantes de la zona que suelen requerir usos temporales reducidos. Se desarrollan en zonas de gran atracción de negocios, turísticas, eventos, etc. Pueden ser también para vehículos pesados (camiones, autobuses).
- Residentes.
- Aparcamientos de empresa, para el personal.
- Mixtos, cuando se dedican a varios de los tipos anteriores.
- Por ubicación:
- Subterráneos o bajo rasante.
- En superficie, generalmente en bolsas o áreas habilitadas para ello (aunque muchas veces son “descampados” o solares sin uso)
- En altura (edificios).
- Clasificación respecto al tipo de usuario:
¿Por qué hay indisciplina?
Si se pregunta a los ciudadanos la respuesta mayoritaria sería: porque no hay donde aparcar, es decir, la demanda es muy superior a la oferta. ¿Y qué provoca esa indisciplina?:
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Afecta a circulación peatonal por ocupación de aceras |
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Afecta a las rutas peatonales, ocupando los pasos peatonales, los puntos de cruce |
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Ocupa espacios públicos destinados a la vida ciudadana |
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Reducción de la capacidad de viario lo que genera congestión |
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Afecta a la imagen de la ciudad |
Pero nuestra opinión es que ni la falta de oferta es el problema ni que la INDISCIPLINA es el síntoma de ello. Es un problema de cultura cívica y de dominio del coche sobre el concepto de ciudad de todos.
La indisciplina en el estacionamiento es uno de los peores enemigos de la movilidad en las ciudades porque:
- Resta eficiencia a las políticas de movilidad, pues favorece al vehículo privado frente a otros modos más sostenibles y económicos.
- Resta eficacia, aminorando el impacto positivo en la movilidad de las acciones de mejora en transportes públicos, infraestructuras, vía pública, etc.
- Es injusta, porque “premia” a los insolidarios, y “castiga” a los ciudadanos que usan otros modos (peatones, ciclistas, usuarios de transporte público).
- Resta credibilidad y crea “efecto llamada”, poniendo en riesgo el éxito de implantación de cualquier política de movilidad.
Las cuentas de la indisciplina
Aquí presentamos unas muy clarificadoras:
Además, disponemos de estadísticas de diferentes ciudades españolas en las que se ha comprobado que existe una media de un 33% de operaciones de estacionamiento en infracción (viajes, en definitiva).
¡Uno de cada 3 vehículos estaciona en lugares ilegales!
Se ha constatado que tras actuaciones continuadas de intensificación del control de la indisciplina de estacionamiento:
- Los usuarios optan o por estacionar en parking o en zona regulada (40%)
- O por traspaso intermodal (36%, a pie o a transporte público).
- Se puede evaluar como media un prometedor 12% sobre el total de coches los que cambiarían de modo con una actuación enérgica y sistemática sobre las conductas de estacionamiento irregular.
En relación al factor inseguridad determinado por la ilegalidad en el estacionamiento se ha constatado en muchos núcleos urbanos la elevada correlación entre ilegalidad de estacionamiento y probabilidad de sufrir un accidente.
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Y podríamos decir mucho más sobre el tema de aparcamientos (estad seguros que un articulo de costes de aparcamientos haremos). Pero queremos que los lectores opinen. En definitiva: para nosotros la indisciplina es un mal, una falta de educación, una falta de cumplimiento de la legalidad, una dejación de las autoridades y, sobre todo: un perjuicio para la mayoría de los ciudadanos y un problema para la movilidad global porque restringe la capacidad y potencia el uso del vehículo privado.
Y recuerda: si lo haces tu te lo harán a ti o a alguien de tu entorno.
Os esperamos
Este artículo lo he escrito con Miguel Magaña.