Chua, Lago Titicaca, Bolivia [gap height=»5″] [dropcap style=»default, circle, box, book»]L[/dropcap]levaba tiempo sin hablar de mis viajes como podéis ver en otros post. Así que retorno a escribir de una de mis aficiones favoritas que suelo hacer generalmente ligado a un viaje de trabajo. Y lo hago hablando de Bolivia, [pullquote align=»right»]«De Bolivia me encanta su naturaleza, su gente y los proyectos que se están abordando»[/pullquote]país por el que he apostado profesional y vitalmente. [gap height=»5″]Me encanta su naturaleza, su gente y los proyectos que se están abordando y en los que estoy participando como el Corredor Ferroviario Bioceánico Central o el Programa Municipal de Transporte (PROMUT) de Trinidad del que se habla en esta entrevista.
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La Paz escondida
Ahora nombrada una de las maravillas del mundo moderno según la clasificación de New7Wonders Cities, La Paz me encanta porque hay que descubrirla. Excepto en la zona de El Prado que tiene una actividad a todas horas, el resto de la ciudad suele “acostarse” pronto… aparentemente. Pero si vas buscando o te unes a su gente puedes conocer sitios especiales. [gap height=»5″]Os cuento de algunos de mis favoritos:
- Plaza de Avaroa donde puedes disfrutar viendo la gente que se sienta o pasea alrededor de la estatua del héroe que no pudo evitar que Bolivia perdiese el mar. Alrededor de esta preciosa plaza del barrio de Sopocachi se encuentran los bares que más frecuento:
- La Ginguette, donde puedes tomar excelentes cervezas artesanales de Quinua y compartir sus tablas de embutidos y quesos en un ambiente tranquilo de inspiración francesa.
- El Alexander que tiene Wifi y donde se puede tomar un café o una excelente ensalada de quinua.
- El Sucremanta, para comer ese menudito tan delicioso y que sienta estupendamente los días de frio de La Paz.
- La Comedie ya para una cena o comida más seria o especial.
- El Anden donde puedes tomar una copa o un singani sour, coctel típico de Bolivia mientras escuchas excelente música en un lugar decorado como si fuera un ferrocarril lo que siempre, ya sabéis, que me inspira.
- La Malegría donde se puede escuchar Saya, el baile afroboliviano en un boliche que nadie encontraría y que siempre está lleno a la medianoche.
- El Piratas en la zona del sur donde puedes comer estupendamente y escuchar música en vivo. Al final todo el mundo termina bailando.
- Por el centro colonial:
- El Museo de la Coca donde puedes conocer la historia de ese producto tan controvertido.
- El restaurante mexicano La Cueva, en la calle Tarija donde puedes encontrar otras variedades de restaurantes.
- Y cómo no, un sitio para las noches bohemias, el Boca y Sapo donde mientras charlas y bebes, puedes escuchar excelente música en vivo española y de América. Una delicia que encontrarás en la calle Jaen.
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Sucre y Potosí, la herencia española.
Son dos ciudades que todos los españoles hemos estudiado en el colegio, leído novelas, muchas de ellas épicas o visto películas. Hasta que el París-Dakar llegó al Salar de Uyuni y La Paz se hizo ciudad maravilla del mundo moderno, casi eran las mejores referencias de Bolivia. De hecho hay un famoso dicho que se dice a los niños: «mi niño, vales más que un Potosi». Porque en Potosí, como todos sabéis, había mucha plata, mucha que los españoles de los siglos XVI a XVIII especialmente se llevaron para su país. Potosí recuerda a esa época, tanto por el cerro donde están las minas como por el centro colonial. Eso sí, resguárdate del frío y prepárate para la altura si no lo llevas bien. [gap height=»5″]Sucre es una ciudad preciosa, con ambiente universitario, yo la calificaría como la Granada de Bolivia. Es capital Administrativa aunque está claro que es La Paz donde se gobierna y Santa Cruz donde hay más dinero. Pasear por Sucre, que tiene mucho mejor clima que Potosí, es una maravilla.
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La Chiquitania y las misiones.
Desde Santa Cruz hacia la frontera con Brasil puedes hacer un recorrido por la región de la Chiquitania que siempre recordarás. Antes de adentrarnos en ella os hablo de Santa Cruz que es una ciudad con una economía próspera y una actividad amplia. Os destaco mis lugares favoritos:
- El parque urbano para correr.
- El hotel Los Tajibos si alguien te lo paga, si no, puedes al menos ir a almorzar o cenar a los restaurantes de alrededor que son excelentes:
- En el mismo hotel puedes cenar en un restaurante de inspiración argentina pero donde lo recomendable es la pasta, mi comida favorita cuando voy a Argentina donde se nota la clara influencia italiana en este país. Se llama el Piegari.
- Los Hierros, que antes estaba sobre la Monseñor Rivero y ahora en la San Martín. Excelente carne.
- El Arriero, también con maravillosa carne en un ambiente más popular que el anterior. Me encanta.
- Y ya para tomar una cervecita en una terracita (siempre que el calor y la humedad de Santa Cruz te lo permitan) esta el Sahara Drinks.
- Para salir por la noche, puedes ir al Luna, un lugar de música y karaoke que tiene ambiente hasta el amanecer.
Adentrémonos pues en la Chiquitania: esta zona encuentras pueblos encantadores como San José de Chiquitos, misiones heredadas de la época española (que te recuerdan a la película que interpretaron tan maravillosamente Robert de Niro y Jeremy Irons) y como no, paisajes como la muela del diablo que puedes ver desde la línea férrea.
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Salar de Uyuni, el lago de Sal.
Si quieres sorprenderte de verdad en Bolivia y encontrar un lugar único en el mundo, no lo dudes, visita el Salar de Uyuni: es un mar de sal que es el mayor desierto de sal continuo y alto del mundo, con una superficie de unos 10.000km2. Está situado a casi 4000 metros de altitud en el suroeste de Bolivia, en el departamento de Potosí, dentro de la región altiplánica de la Cordillera de los Andes. [gap height=»5″]El salar de Uyuni es la mayor reserva de litio en el mundo con el 80% del litio mundial. Simplemente recorrerlo es una maravilla y puedes parar en:
- Hoteles de Sal, hechos de esta materia enteros.
- Isla del pescado (que en realidad esta llena de cactus).
- Los ojos del Salar donde ves pequeños agujeros por donde emergen burbujitas.
- El volcán de Tupamanu cuya subida puedes hacer viendo momias y plantaciones de quinua.
- Y cómo no, el cementerio de ferrocarriles.
Me queda por hacer el itinerario de la laguna colorada y el salto a Chile para ver el desierto de Atacama. No tardaré en hacerlo. Mientras, os dejo con una buena colección de mis fotos favoritas que ilustran lo que es una visita a este paraje natural.[gap height=»5″]
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Trinidad y el Beni, la amazonia.
El Beni tiene parajes amazónicos de los que me quedan muchos por descubrir, pero Trinidad la conozco bien. Es una ciudad con encanto, donde hace mucho calor y humedad. Aparte del toque colonial, es célebre por sus numerosas motos, modo de transporte privado y público principal (existen las famosas moto-taxis). [gap height=»5″]El lado oriental de la Amazonia esconde el espectacular Parque Nacional Noel Kempff Mercado. Trinidad esta más o menos a 500 kms de Santa Cruz y La Paz. La ciudad de La Santísima Trinidad fué fundada en 1686 por el padre Cipriano Barace como la segunda misión de los jesuitas en las tierras bajas del sur de Beni. Fué construido originalmente en las orillas del Río Mamoré, a 14 km de su ubicación actual, pero las inundaciones y la peste a lo largo de las riberas del río requirió su traslado. [gap height=»5″]Mi sitio favorito es sin duda el Tabano, dónde puedes pasar una agradable cena a base de Yacaré (lagarto, pero entendido no como las lagartijas esas pequeñas que tenemos en España, sino como los cocodrilos) y buena música. Pero os cuento otros sitios que me gustan:
- El Sabat, para echar un buen rato con música en vivo y bailar un rato con los amigos.
- Los restaurantitos frente al rio en el Tapacaré o Loma Suarez, excelente pescado de río.
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Lago Titicaca y sus 4 estaciones.
El lago Titicaca es un sitio maravilloso increíble a 4000 metros de altura. Transmite paz. Te relajas. Es famoso por su buen pescado, en especial la Trucha y el Pejerrey, excelentes solo a la plancha. Aunque todo el mundo va a Copacabana, es justo el sitio para mi menos interesante por ser demasiado turístico, aunque vale la pena para ver los bautizos de coches y cruzar a la Isla del Sol. [gap height=»5″]Una cosa muy curiosa que te puede ocurrir en el Lago es que pases por las 4 estaciones: desde calor, hasta lluvia y granizo…..¡en el mismo día! Aquí os dejo con algunas fotos: [gap height=»5″]Dejo para un próximo artículo tres lugares maravillosos:
- Coroico y las Yungas en bicicleta.
- Tarija y los vinos sobre la que me extenderé especialmente porque para el próximo mes de Diciembre tendré mucho que contar.
- Cochabamba y su entorno.
Y ahora animo a los lectores a compartir sus experiencias en este país. En especial invito a los amigos bolivianos que descubran otros lugares que seguro todavía no conozco.